¿Y la cybernovia de Don Rigo?

--Cómo que lo engaña su cybernovia don Rigo?? No me chingue, ni siquiera se llama Gloria Trevi. Conque eso le dijo para seducirlo, conque se llama Micaela Casas, que tiene tres hijos y, sí, eso sí, sí salió de la cárcel. Que se robó unos calzones de Milano y la entambaron por mala sangre. Cuándo le dijo eso?

--No grites tan fuerte don marco, te va a escuchar el de la mesa de al lado. Y ya ves que se la pasa hablando mal de todos los cafeteros que vienen al Fénix. Pues sí, me dijo que quería verme y antes de verme, que debía conocer toda la verdad. Yo le dije: Cuál verdad y me dijo: mi historia....

--Ah chinga chinga, ha de ver muchas novelas esa doña.

--No es una doña, es una mujer de 30 años. Su esposo la abandonó cuando tubo su primer hijo...

--Y cómo chingados tiene tres??

--Bueno, sí, sí, don marco. La abandonó pero a veces la visitaba. Ya ves, un hijo es mucha responsabilidad, y yo creo que le hace bien a sus tres hijos que evan de vez en cuando a su verdadero padre.

--Jejejeje, no don Rigo. Pues sí. Y para cuándo el cuarto pues??

--Nunca, ella me juró que ayer fue la última vez que tenían sexo.

-- Ayer!! cómo que ayer. Apenas salió de la cárcel y ya anda visitando a la raza???}

--Ella es una mujer muy guapa, y todos los humanos tenemos necesidades. Además si uno mata un perro, ya le dicen mataperros. Qué tipo de persona eres, no que muy estudioso y muy liberal. Para qué chingados te sirve leer tanto libro afeminado de poemitas, si vas a hablar como un bruto.

--Qué? usté a mí no me grita don Rigo.

--Perdóname marco, disculpa, no te vayas. Eres mi único amigo, perdón. Es que todo ha estado mal. Desde que me dejó Lucrecia todo va para abajo. Mi hijo se porta altanero, y no ha habido clientes en el consultorio, hoy nada más tengo 20 pesos, mañana no sé que voy a hacer.

--Está bien no chille. Tampoco me aplique la llorona. Yo lo escucho, pero tampoco crea que voy a llorar con usté. Una cosa es que yo no tenga televisión en mi depa, y otra que me quiera chutar novelitas chafas de verdad.

--No sé qué hacer don marco, soy un triste pendejo, y ni siquiera me gusta emborracharme.

--Pues en primer lugar, deje a esa Micaela. No me ande con mamadas de irse a buscar amor. Mejor pógase a trabajar, y mañana nos vamos a ver putas.

--De verdad? don marco, muchas gracias.

--Zaz le doy chanza, nomás porque no resisto ver a un amigo llorar.


Y a lo lejos se escuchaba "Vuelve a ser aventurera, vuelve a ser lo que antes eras" mientras el viento soplaba su cálido aroma de nada.