Image Hosted by ImageShack.us Bodrio Angelical: Excelente semana.

domingo, septiembre 19, 2004

Excelente semana.

El lunes 13 de septiembre:
Yo iba caminando como es mi costumbre, cuando ando, despreocupado por las calles de la Vil Guadalajara, tratando de quitarme la cruda del fin de semana (que para que todos los sepan empieza el jueves) y un tanto encabronado porque el técnico no me hacía el honor de decirme que tenía mi pc (virus, claro, pero... se iba a salvar?) y el muy gandallita, ni siquiera me llamaba y menos contestaba mis llamadas, cuando sentí un leve dolor de estómago. Me dije, ah, es lunes y ya me siento vivo.
Cómo petrimetres yo me iba a enterar, que precisamente en el mes de la patria, mi pequeña vida iba a dar un cambiazo. Quién tiene los dedos en el teclado y está posteando mi vida desde allá arriba (o allá abajo) antes que la viva, y se regodea haciendo mamada y media para que yo, como monito de video juego sortee las mejores trampas, siempre saliendo perdiendo... joputa!

Total, se hizo de martes, y el martes exactamente en la tarde, que me entero que una infección estomacal vivía a sus anchas en mi cuerpo (el muy jodido) y que no era una simple infeccioncilla, neee, era de esas que sientes que el alma sí existe, sino, cómo demonios te explicas que sigues viviendo, a pesar de las agujas y el dolor. Noche de hospital.

Que se hace de miércoles, y el miércoles, a eso de quien sabe que horas, que me enojo con la bellísima Violetta, que en la facultad se me olvidó que tenía que exponer (la maestrita no me dijo nada, pero mis compañeros (los muy marikanenas) me miraron encima del hombro). Y de beber, pistiar, ingerir sustancias felices, nada.

Que el jueves me sorprende un poco más repuesto, con sus alas de alkol, y yo nada de beber siquiera. Estar en un hospital, con una aguja en el brazo y un bote con suero mirándote con cara de "te va a llevar la señora de la guadaña" no es mi estilo. Y ese mismo jueves que se acaba el asunto Violated, Violetta. Se acaba, y zaz, se acabó. Además no me visitó en mi lecho de muerte estomacal... ah, pero que tal en los petit morts...

Que el viernes llega con toda su furia, la yerbabuena me miraba desde mis cajón de felicidad diciéndome: qué pedo chaval, ya se acabó el rocanrrolll, y yo le contesto: ya estoy viejo hombre, no me jodas, y me contesta: no mames, tienes 27 años, no seas llorón, y que le replico para que se calle: pero me duele, cállate. Y que me regaña con un silencio aturdidor...

El sábado, mejor que nunca, pero con un miedo a comer cualquier cosa empecé a extrañarte. En fin. Sabía que en La Santa iba a ser la fiesta bloggera, no tenía todas las ganas del mundo de ir. No conocía a la mayoría, creo que muy poca gente lee el Bodrio Angelical, aunque más de 5 ya es una multitud, y además no podia beber. En serio, no podía beber, no es como cuando pasaba 8 días de fiesta plebeya con el bueno Tognac, y sólo levántandome para seguir bebiendo, no, ahora si bebía presentía algo. No iba a beber, y así fue, no lo hice. Llegamos a La Santa (stylo kicsh como se escriba y se conceptualice) un montón de gente. Todos hola hola, yo hanciando una chela, y hola, este, hola. Violetta me mandaba msj al cel. y ya mejoraba la noche, unas fotos, y nos fuimos al Bar Calavera, allá vimos a Noemí, su hermana su prima, y el Camilo, de allí nos fuimos a la Mutua, y yo con puras aguas minerae, divetido,pero muy sano.
Algo extraño, una amiga de la prepa me llamó diciéndome que se sentía mal, y yo: qué no te quieren en tu casa, jejejejeje (el imbécil de mi) y ella como triste. Estaba borracha hasta la madre, y me decía sabe qué madres. jejeje, me acordé de cuando nos conocimos en la prepa y ella me decía que no bebiera tanto, porque haría puras pendejadas. Total. Dos tres llamadas, se calmó, una amiga (todo por cel) me dijo que se iba a quedar en su casa, y que no tuviera pendiente (mmmm... pendiente, tengo como 6 meses que no la veo, y sí somos compitas... pero por qué me llamó a mí) quién sabe. De la mutua cada quien a sus sendas casas. Y yo, sobrio hasta la madre, no triste, pero sí con algo de carga, y esperando no me llegue la cruda emocional.

El domingo, en la mañana, puesto que vivo el insomnio y no estaba pedo, me dormí a las 8 de la mañana, me despertaron a las 10:00 un amigo, que quería conocer el baratillo... ajá, el baratillo, quién quiere conocer el baratillo después de una gran desvelada?? petrimetre de chaval.

Y ahora a escazas horas para quemuera el domingo, con su sol jodedor y su noche lluviosa, he visto que no he muerto, por supuesto que no me he fortalecido (lo que no te mata te fortalece, ey) digo: excelente semana. A lo mejorla próxima me roban mis libros, o me cortan un... mejor un pie, no sé. Algo peor que esto.