S
Sí, no lo culpo.
Yo también hubiese querido morir en sus zapatos.
Es por eso, que escogimos el mar más azul
es de las mejores olas
vaciamos (él me ayudó) un saco completo de cemento
y revolvimos con agua de ola recien nacida,
cuando ya todo estaba preparado
le disparé en el rostro.
Nunca hubo un muerto más contento.
Yo también hubiese querido morir en sus zapatos.
Es por eso, que escogimos el mar más azul
es de las mejores olas
vaciamos (él me ayudó) un saco completo de cemento
y revolvimos con agua de ola recien nacida,
cuando ya todo estaba preparado
le disparé en el rostro.
Nunca hubo un muerto más contento.
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